Forma espacios en blanco
en el cuerpo,
sin tiempo ni modo
en un único movimiento
a su ritmo,
en el cuerpo,
sin tiempo ni modo
en un único movimiento
a su ritmo,
sin vaguedad existe
en las raíces y los tallos
de cada pensamiento,
late con cuidado
y los rodea hasta cinco metros,
resta invisible
detrás de los versos,
en los sueños y la distancia
libre
se sostiene
en un infinito concreto;
se escribe sin consuelo.