De artificios fulminantes
sin respuesta,
de su mediocridad
y la furia que le sigue,
de los días sin descanso;
de esos inventos que ocurren
y suceden
por todos lados,
a discreción;
de lo que alcanza y atraviesa
inevitable
por fuera y por dentro,
explota en el rostro
dejando casquillos
en forma de arrugas
sin parar;
del corazón que aún late detrás de todo;
de ti, de mí.
A veces las letras son sólo versos, otras, cuentas cosa y otras, las menos, pequeñas partes nuestras que nunca contamos. Estos versos transmiten esa lucha constante con las dificultades de la vida, las respuestas que no se encuentran y generan una frustración acumulada. -una idea que vienen repitiendo tus letras- Los días interminables, los inventos y situaciones que nos sobrepasan se presentan como inevitables, dejando marcas visibles e invisibles, como las arrugas que el tiempo imprime en el rostro. Sin embargo, a pesar de todo, el corazón sigue latiendo, la fuerza de lo esencial: el vínculo entre "ti" y "mí". Si tuviese que resumirlo en una frase, diría que es una reflexión sobre la resistencia interna frente a los golpes externos y el poder del amor como la conexión que permanece.
ResponderEliminarai, compañero de letras.. no te haces una idea de lo mucho que ves en mis palabras.. gracias una y otra vez por detenerte siempre a verme...
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