miércoles, 4 de diciembre de 2024

De un segundo abajo

Nos caímos del mismo árbol,
tú con tu voz,
yo con mi ánimo;

se me rompió el cerebro
y lo escribí todo,
la alegría desatada,
el dolor dentro sin nada en medio;

y ahora aislada quizá queriendo,
no me quedan casi lazos,
ya apenas puedo abrir la puerta.

Y no es una excusa.
Yo no te he matado, y a ella tampoco.

5 comentarios:

  1. ..."y lo escribí todo,
    la alegría desatada,
    el dolor dentro sin nada en medio"...
    Muy bueno!!...

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  2. Te dejo esto, Tali...

    Vacío

    Le inquieta el desarraigo
    y la soledad
    en el espacio vacío.
    Puertas y ventanas
    cerradas a cal y canto,
    esporas de abandono en el aire,
    nadie en el lugar.

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    Respuestas
    1. Acabas de plasmar mi sentir, poeta... Gracias por compartirte aquí y de esta manera tan bella y cercana..❤️!

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  3. Gracias a ti, Tali...🌞

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