Al oído

Todo lo que se vio desaparece hoy;

y detrás del espejo,

en un reflejo de vapor,

permanece un corazón con tu nombre;

queda un rayo de luz en la pared,

restos de sudor en páginas de carbón,

palabras de dibujo en vinilo,

colores en tela y un lápiz de libro;

y en papel,

sonrisas de brazo abierto,

infinitos en blanco y negro,

promesas en piedra, alientos,

palabras susurro que no olvidan:

tú, yo, lo que vino.

Lápida

Quedan restos de una batalla

y un funeral de dos rifles;

a un lado se esconden los años

y al otro el cadáver;

se arrojan palas de memoria

y las amapolas se quiebran,

no tienen ya hueco;

hay un desierto para cada entierro

y un mismo féretro escondido.

Fuimos

Aquella noche dormimos

entre voces pequeñitas al oído,

recostando la cabeza en la frente,

en el pecho;

y las manos se cogían,

recorrían el cuerpo y volvían;

se apretaban las piernas

respirando el cuerpo;

y por la mañana,

nos descubrimos en un balcón

con el sol de frente y la misma sonrisa.

Rostro

Estructura ósea de máscara rota, líneas de colores de otros cuerpos;

y falta sueño y una alegría, una sorpresa en dibujo.

Lecturas

Cada vida es un mundo y cada pérdida un libro;

y hay vínculos únicos, caminos inseparables, miradas al infinito.

Cuando todo acaba, un segundo se detiene y esa vida para.

Una carta

En la noche no hablamos, la mañana lo dijo todo;

y no estaba preparado, no iba a pasar eso;

y nos perdimos años juntos, seguimos perdiéndolos;

hay decisiones que te quitan la vida, y la libertad también es esto.

Arrebato

Una fuga en tierra hacia un lado;

un artificio de diferentes tonos;

una salida inesperada;

la muerte, el tiempo;

nada en su sitio.

Imágenes

Un tronco de tallo fuerte

inclinado en sentido contrario;

un camino de hormigas

con giros y vueltas hacia atrás;

un ángulo al lado del río

con hojas en tinta que vuelan;

en un lugar inacabado,

tu piel de ángel en grieta

detrás de una nube de viento;

hasta ti.

Fuego

Aquella mañana escribió un cuento.

Dos fieras despiertan al alba

corriendo los bosques sin tregua;

asaltan matorrales entre la niebla,

se acompañan con rugidos;

y allá donde acaba la tierra,

a la altura de un precipicio invisible,

se detiene la vida un momento;

y la arena vuela en círculos,

los rayos la atraviesan

dejando un rastro en el suelo,

hacia la cueva;

y las rocas se funden

en un manto de tierra yerta.

Voluntad

En un campo de raíces al descubierto,

de rocas permeables y aguas subterráneas,

el destino se rompe con una sonrisa;

es el tedio que paraliza;

el vértigo se mueve en un mundo

que se da la vuelta desde la caverna.

Tiempo

Solo hay un camino ahora,

y parece alargarse en las manos;

a cada paso queda un rostro,

una sombra que empuja al cuerpo;

a lo lejos están las piedras,

y son las mismas;

un océano de sentidos

se recoge y desborda dentro;

y pasan los días, las horas;

y yo no estoy.

El hilo rojo del destino

Sucede en un hilo invisible
que la luna descarga por las noches;

y circula la tierra

escondido en un manto de niebla;

recorre los campos,

habita ciudades y pueblos vacíos,

gira en ola hasta la playa;

y a veces estira, otras contrae,

pero no puede romperse.

48

En el bosque hay una fiesta de ramas;

en el camino,

flores y una amapola con tu nombre;

hoy crecen los árboles

y hacen morse en tu ventana;

las nubes son almohadas;

el viento, sábanas con tus palabras;

y hay una brisa en tus párpados

con el sol de regalo;

cada año llega un día

con una estrella de puntas, a tu lado;

y se disparan los sueños,

se tatúan en los rayos;

hoy el cielo te dibuja y sonríe.

Cementerio

Hay un gesto que no dice nada,
un movimiento del cuerpo

que no se descubre;

y saltan palabras

dejando un cadáver a cada metro;

en el zigzag de la lluvia,

las gotas esquivan los truenos

y tocan tierra;

las plantas se abren,

el musgo se da la vuelta;

detrás de las lápidas están nuestros muertos.

Recuerdos

Se hizo el día despacio;

el plato daba vueltas

y los colores se iban haciendo;

a un lado estaban los brazos,

se tocaban las manos;

las plantas ya miraban al cielo,

estábamos debajo;

y de la noche quedó el sueño,

las caricias, los besos.

Veo

En una pared pasillo,

a hurtadillas desde el suelo;

con palabras a diario

y ojos siempre abiertos;

desde la esquina en acampada

con un juego de besos;

taza en mano y un cuaderno;

contigo en el bolsillo izquierdo.

Vidas

A un metro del suelo;

a braza en el agua;

en el camino a casa;

en el otro extremo;

a falta de un aliento;

sin frenos;

con miedo;

siempre un último intento;

sosteniéndonos, riendo.

Respirar

Hay carbones sobre bosque,

un lugar muy lejos dentro;

una sonrisa detrás de lo que pasa;

un latido que no acaba;

un espacio que mira todo

y empuja el cuerpo.

Cuando falta el aire,

hay una brisa de invierno;

del mar a tierra, de tierra al mar;

no hay desierto sin viento.

Encuentro

Si te acercas un poco,
los cuerpos tiemblan de nuevo;
y en el camino hacia ti,
los pasos se vuelven lentos,
las palabras mudan;

y las manos tocan sonrisas,
susurros de miedo;

y las piernas flaquean

en un equilibrio mágico,

en el punto más alto del suelo.

Pausas

Todo empieza con un impulso imparable,
como un salto de los que vuelan;

y se abre el cuerpo en una burbuja

que explota al aire;

y corre la sangre al corazón,

lo inunda desbordándose;

la razón se pierde en un grito

y los ojos despiden rayos de color;

la vida podría ser esto.

Carteles

Los árboles hablan de ti,
con una palabra en cada hoja

y un cuento en el bosque;

en una roca hay un vive en blanco,

a lo alto, saludando;

y en el camino hay brozas

con tesoros debajo;

y a cada paso, en cada curva,

el viento empuja a tu lado;

y sonríes.

Carmen

Hay lugares de este mundo que siempre te recordarán de dónde vienes, y su olor te acompañará para siempre; lugares a los que no quieres volver, pero que te arrastran a ellos sin poder evitarlo, porque son muchos, porque los hay a millares y en todas partes, porque se reproducen como una necesidad de la que no puedes escapar.

Y a veces la vida duele tanto que casi olvidas el nombre de tu madre, o lo recuerdas, pero no lo reconoces como suyo; y te duele y te avergüenzas, como si debieras recordarlo siempre, aunque la verdad es que un día lo olvidaste para seguir adelante. 
Siento que me arrastro por el suelo, mama, siento que me pierdo como tú te perdiste un día; siento que todos esos brazos a los que agarrarme, y que tú nunca tuviste, no son suficientes para levantarme hoy.

Han pasado los años, muchos años, y nada ha cambiado. La vida sigue, mama, la vida sigue.

Muerte

Quedan piedras en recuerdo,

bajo tierra y elevadas en cemento,

flores y trocitos de huellas,

miradas ausentes

y cada vez menos lágrimas;

hay un terreno vacío en medio,

lejos de todo lo que fueron;

hay un lugar en cada cementerio

donde descansar el miedo.

Rotos

Recuerdo mirarme las manos,
tocar el suelo,

recostar la cabeza y abrir los ojos,

fijar la mirada en un objeto sin verlo,

en posición feto;

y tengo frío;

sé que pasará la noche,

que se alargará de nuevo

y el viento despertará al alba;

hay un silencio distante, y duele.

Caminos

A ritmo de huellas,
como esponjas en el suelo

dibujando senderos;

y se nutre el cuerpo

encontrándose a cada paso;

y la tierra levanta el aire,

los charcos suben al cielo,

amanece;

y caen neones en la noche,

tropiezan las piedras,

se abren paso los árboles

y un claro susurra tu nombre;

ahí te recuerdo.

Tormentas

Y no se detiene el agua;
y te arrastra con las nubes

en un momento;

y el mundo se para a tus pies,

te clava en la tierra,

dibuja todos los sueños en uno

y dispara alientos;

el negro se descubre recio entre los truenos;

y avanzas.

Espirales

Hay un ahora no puedo que golpea el corazón;
y nada ocurre donde acaba un infinito,

no todos llegan;

y aquel espejo que dibujamos

nos refleja hoy con otros ojos;

y no vemos las manos,

ya no tienen tacto;

nos dimos la vuelta sin agarrarnos.

Intensidad

Ya fuera en la cueva,
donde el verano acaba:

y se recoge la arena suspendida

que pintaba en amarillo, azul, verde;

con carbón en el cuerpo

y la cara descubierta;

aquí, en un sinfín agudo y quieto.

Nosotros

Hoy se acabaron también las palabras
y con ellas los sueños;

el amor desgarra.

Memoria

Los días giran cada año;

y hoy vuelve aquella noche

que empieza ya a recogerse al alba;

y se despertarán los sueños,

o dormirán para siempre;

y el silencio descubrirá lo que nunca se dijo,

o lo enterrará de nuevo;

por más que se deje pasar el tiempo,

hay horas que no se olvidan.

Dos galaxias

En unos días acercaré el oído al suelo,

detrás del viento;

en aquel universo de abrazos y besos,

de viajes y sueños;

y levantaré la mirada una vez más

para decirte que te quiero;

y no volveré a hacerlo,

ya no podré vernos.

Existo

Hay una hoja en blanco
que esconde recuerdos,

en un rincón, alejados del viento;

se escribieron en una piedra,

en una pared, en un poema;

se dibujaron en carbón

y también en madera;

y se pueden quitar las manchas,

pero nunca las huellas.

Pliegues

La verdad está en los párpados,
en los que se doblan de día

y se van hinchando;

se escriben como una burbuja

que nunca explota;

no desaparecen en la sonrisa,

no cambian nunca;

no se suben ni se esconden,

no desaparecen en los ojos;

hablan de ti.

Separados

A un paso hoy nos sentamos,

cada uno a un lado;

y un cartel permanece a lo lejos

en un primer beso que en la noche

nos prometió entre susurros y abrazos;

y no había dolor ni malos recuerdos,

todo apuntaba riendo.

Y volverán las mariposas al estómago,

otros amores nos acercarán al cielo;

y serán preciosos;

pasarán uno a uno por nuestros brazos,

dormirán a nuestro lado,

recorrerán nuestro corazón

y le darán la vuelta para amarlo.

Y cuando todo pase,

cuando lo hayamos probado,

el infinito volverá a llevarnos al lugar

donde una vez nos creímos muertos;

el amor no migra, solo vuela a ratos

para asegurarse que está vivo

y sabe lo que quiere.

Rastros

Hay huellas cuando andamos,

colores que cambian

y una constante que acompaña;

en todo lo que buscamos

hay un reto que crece a nuestro lado;

y en algún lugar de dentro

se guarda todo lo que soñamos;

la felicidad acecha.

Humano

El dolor no habla de nadie,

no busca culpables;

y cuando las piedras se acumulan

y duele pisarlas,

cuando los sueños se apagan

y cuesta dormir,

cuando el amor cambia o muere,

cuando el suelo se mueve,

la generosidad

es permitir que todo se llore.

A un paso

Una mariposa sostuvo dos sonrisas

en un árbol encantado;

y naranja era el contorno

con vueltas en los ojos, goteando;

y las manos protegieron un abrazo

que no necesitó halagos;

no se encontraron en el agua,

salieron de una toalla de nombres gastados,

amarilla nublado;

y se curaban besándose las palabras,

coloreando sentidos del pasado,

recorriendo el cuerpo con la mirada,

con las manos;

y guardaron todo lo que soñaron

confiando en un cuaderno

que se escribiría solo en unos años.

Libertad

El camino es de amapolas;

y no obedecen a este mundo

ni responden ante nadie;

son la mala hierba de color negro

que explota en sangre.

Y al lado de ellas,

conspira el viento en ráfagas

de color amarillo;

entre sus tallos, desde la raíz,

con hojas que atienden,

se rebelan una a una hasta florecer.

Rifles

Toca romper espejos y quemar puentes,
dejar páginas en blanco

y no volver a mirar los cuadros;

queda un corazón más roto

y un aliento fingido;

todo lo que se dijo

solo fue una fantasía en vinilo

que se ocultó en la euforia de otro tiempo;

y las promesas se enterraron

conmigo dentro sin yo saberlo.

Infinito

Las palabras cambiaron de nombre
y la magia de sitio;
lo eterno se trasladó a otro cuerpo
y quedó un afecto vacío
que se alargó en un silencio
que hoy se descubre desierto;
y las dunas son nubes
que se cierran con todos los poemas,
y también los dibujos.
Lo más bonito que jamás se dijo
se mueve ahora en otro universo.

ilusiones

A cada paso cerrado,
entre la magia y las manos,
se perdió un color de los labios;
y la lluvia dejó de hacer ruido;
y entre trazo y trazo,
se acercó un arcoíris plano;
los susurros de aquel año
se alzaron callados entre tus brazos
y el infinito dejó de andar descalzo.

Calma

Y todo pasa por algo;

una parte queda intacta

y se levanta un suspiro

que despierta las noches

entre el sudor y las sábanas.

Y todo puede estar bien;

todo pasa si quieres.

Patio

Hay una piedra al fondo

y destellos dentro;

todo está oscuro hasta allí;

y se intuyen manos,

y una voz doblada se eleva;

en un lugar a lo alto

se estiran brazos;

traspasaron el cielo a los lados;

en esa mitad estamos.

Latidos

No se me va el amor,

no huye nunca;

se agarra al tejido

y circula sin freno;

y traspasa el cuerpo,

alcanza el infinito desde dentro;

se extiende golpeando el corazón,

llamando a los sueños;

y las lágrimas alertan

desde un lugar sin miedo.

Al corazón

Hay una tormenta que me habla de ti;

y un árbol que pudo ser nuestro

se esconde para renacer contigo;

y no hay aire a los lados,

late solo desde la tierra;

y espera un atardecer

al final del verano

donde hay besos estrella

y abrazos largos.

Allí te espero estos años, con cuidado.

Marta

En las manos descansa una historia

que viene de lejos;

y una voz quebrada,

como de burbujas que explotan al cielo,

aún dibuja calor en los dedos,

alientos que todavía abrazan con miedo.

Y quedaron amapolas en celo,

campos de luna y fuego

al lado de un árbol con mi nombre.

En este mundo

No brilla la cara en la pobreza,

el sol no ilumina la belleza

cuando llueven horas a los lados.

Disfrutan los poros en otros cuerpos

y los ojos caen a bocajarro

sin asentarse del todo;

en un lugar precioso

se guardan los sueños

arrebatados de cuajo.

Y no hay sorpresas.

Psicosis

Quizá la verdad está en los sueños

de estos días,

quizá nada es cierto;

y una pausa en la espera

revela un momento ya perdido

en cada hora de estos años de llanto.

Y hay una promesa marcada en amarillo

y un azul que quedó en el cuerpo,

y en los cuentos, los gatos

y esos cafés que pasaron;

y el cuidado de estos meses

necesitó de esa ruptura para el amor,

ese que acoge la intensidad enloquecida

que solo un alma confiada abraza.

Cuidado

Todo empieza en un coche,

tres mujeres y seis brazos;

todo sucede casi sin pulso

y unos ojos cansados,

el calor de dos brazos más y un beso,

la compañía de otras lágrimas

y el silencio, los abrazos;

y todo sigue con una máquina de coser

y un taladro,

con aún más brazos,

terrazas, textos y audios.

Nada acaba a vuestro lado, estoy en casa.

Magia

Piedras que levantan el suelo,

plantas caídas del cielo

y un suspiro que acaba.

Todo se despide en luto;

caen hojas, lloran ramas,

la piel cambia

y la tierra cubre en huellas

un musgo que graba una línea;

y todo pasa por el mismo sitio,

está unido; y habla, habla.

Lo que no se entiende tiene un sentido;

y esta vez eres tú.

Un mundo aparte

Hay un momento que lo descubre todo,

un colapso de esperas;

y la magia desaparece en otro cuerpo

y los cuentos no se sostienen ya.

Y en los sueños de estos días

hay un sentido en los ojos,

un calor que es solo nuestro,

que empuja la vida a través de ti

en un lugar que construimos

que ha despegado al infinito;

y lo hicimos, lo hicimos todo,

hicimos más sin medida;

y el camino hasta aquí nos reúne,

allá donde el corazón escoge

una lealtad que no puede ser humana;

y ya no hay mentiras.

Ateos

Las palabras no se miden;

hay una vocal en ellas

donde caen las fantasías

y los sueños crecen;

y lo más bonito se repite en el mismo infinito,

aquél en el que un dia quisiste verte.

Todo es igual de bello, y duele.

Duele

Acompaña tranquila y está oscura,

levantándose una y otra vez durante el día,

arropando en bolita;

y abriga un silencio de caricias

y de huellas que iluminan,

mirada fija y piel calentita.

Y tú nunca te has ido;

todos mis rincones son tuyos.

Duelo

No sé si morimos aquel día,

no sé si nos cambió la cara

o se nos oscureció el pelo.

Sí se juntaron las lágrimas,

sí se despidieron los cuerpos;

y si vuelvo, algo ha cambiado;

no soy yo en blanco y negro,

ni tú tampoco;

no tuvimos nunca sombra.

Soledad

Las tardes baten en brecha;

y hay un muro en perpetua vigilia

que aguarda derrotas;

y ya no hay lamento en sus torres,

solo un arco y una flecha callada;

y lo protege una niebla de odas

que susurra en la noche;

y la vista no alcanza el final;

la tierra acabará sin batalla,

el único frente que espera.

Ya no hay guerreros.

Cinco cuerdas

En una pared estaba escrito

en dibujos de colores y ritmo;

y todo tocaba el infinito

en un momento precioso

que nos calló para siempre.

Y yo me lo creí todo, y está bien.

No todo sale

Un entierro cesa afectos,

no sostiene más las lágrimas

ni el recuerdo;

en algún lugar está escrito

que todo tiene su tiempo;

para llorar, para reír...

hasta para amar.

En mi funeral,

no todo da en tierra conmigo.

Navegamos

Hoy el agua viene en calma,

respira entrecortada

para descubrir la pausa

en la que nos encontraremos;

y no hay obstáculos en este juego;

en un instante para el delirio,

hay un timón que no tiene dueño.

Equilibrios

Se levanta el cuerpo de madrugada,

en un rincón se apaga el sueño

y un hueco se descubre;

ahí el silencio no duele,

las vueltas fijan una imagen

donde respiran los cuentos;

y desde el patio,

una cigarra golpea sacos de aire

y las plantas bailan;

la vida explota sin prevenir.

Heaven

Una mano en el hombro,

un tatuaje de piel casi plana;

un motor que ruge, y abrazos largos;

un rostro amable y una sonrisa.

Tú, yo, y un rifle.

Laberinto

En una cueva de matorrales,

en una oscuridad de encuentros;

donde guardas los sueños

y decoras anhelos;

seguí el camino de las piedras a los lados

y me recosté en un claro;

ahí te espero, en el cruce infinito.

Sueño

Tengo los párpados en flor;

anoche nos vimos y andabas perdido;

yo me escondía a los lados

y había manos en medio;

no estabas solo

y tu mirada estaba vacía,

parecías buscar un sitio;

en un descuido pude alcanzarte

y de un salto me arropé en tu oído;

y tus ojos brillaron, y los míos;

y dormimos, ya no había manos.

Amanece

No hay ruido a estas horas,

hay movimientos;

y balancean cunas en los árboles,

sueños que se liberan al alba;

descubren vuelos infinitos

y los puentes se inundan;

la calle escribe ahora una historia;

la mía, la tuya.

Redrum

En la vida humana,

en un momento para la muerte,

en un conflicto de lágrimas,

de risas,

de recuerdos presentes que se repiten;

en un tiempo que algunos alargan

para encerrarse

y otros no olvidan;

en ti, en mí, en los que se fueron;

y duele, dolerá siempre;

no hay lugar para esconderse.

Vida a plazos

Tu tiempo no es el mío;

aquí no hay temblores de calendario,

no hay risas ni llantos a ritmo,

ni relojes que dirijan el ánimo;

no hay líneas marcadas, ni tampoco rojas;

no hay tiempo que aquí olvide nada,

nuestro corazón no envejece.

Únicos

En nuestra tristeza hay un rincón paraíso,

un aliento de puños en alto,

de esos que dan la vuelta y abrazan,

que sujetan apoyados.

Ese aliento eres tú, y soy yo;

no me sueltes la mano.

Hoy

Cada tierra levanta un ánimo

y cada aliento una vida;

en todo el terreno que pisamos,

en toda sonrisa;

por los caminos que encontramos

y en los pequeños pasos,

en los tuyos, en los míos, en los de ellos;

y aquí todo respira sin esfuerzo,

aquí no habita el miedo,

aquí te espero.

Mañana

Y te levantarás un día y no estaré;

seguiré el susurro del sur

y volveré a mirar a los lados:

y a cada paso, dejaré una piedra;

y en cada risa un regalo;

y vendrán los días que soñamos,

los que se perdieron en el miedo,

y olvidar ya no hará falta.

Espejos IV

Un ruido crujió el suelo

y dibujó círculos de escalera;

y una bombilla coloreó el sótano

con todos los tesoros del mundo,

con todos los deseos;

y allí tenían un nombre escrito,

uno para cada sueño;

y la niña quiso tocarlos todos.

Fobias

Y allí estaba;

la vida repetía un espejismo

ajeno a las canas;

y aquel niño perdió su rostro,

quedó encerrado detrás de los ojos;

y ahora el agua lo inunda todo;

y una luz se apaga al fondo

cada vez que mira.

Espejos III

Y cruzó sin mirar a los lados,

como hacen los ciervos;

y ya en el bosque,

un oso la invitó a su cueva;

y las paredes tenían sus huellas,

ya había estado allí;

y la luz se apagó al entrar la niña

y una mano pequeña le recogió el pelo;

se dio la vuelta y allí estaba.

Enough

Se me han agotado los rincones;

me cansé de la silla del baile,

de las estrellas con pegamento,

de las fantasías a medias

y los corazones estrechos;

en la habitación de al lado

hay una voz callada

que solo mueve los labios

y repite que no escribe cuentos;

y es que el agua no pasa por las cicatrices

cuando no huele a nada.

El tío Adrián

Hay una imagen guaraní que siempre sonríe;

y tiene un lugar muy lejos que la rodea;

y cuenta historias de miedo a carcajadas;

y siempre está en calma.

Hoy despedimos al hombre

que cruzó un océano entero

persiguiendo un sueño y lo encontró.

Lluvia

Y despierta el agua en las nubes,

despacio, muy despacio;

y hoy espera a que el sol la libere

para lanzarse a los ríos

y hablar con los peces;

y en el mar se hace burbuja

con las ballenas;

y en la tierra regala los campos

y vacía ciudades enteras.

Infantiles II

Cantábamos el Sol Solet

y los peces no dejaban de beber;

y había conductores de primera,

de acelera, acelera;

y elefantes que se balanceaban

y mañanitas para dejar de dormir.

Entonces reíamos, de verdad reíamos.

¿Te acuerdas?

Vida

La manera de movernos,

cada gesto, cada mirada,

descubre el alma que se esconde en silencio;

y no hay un mundo imaginario

que nos asalta a cada paso,

no hay un poder supremo castigando;

en este destierro, podemos amar y amarnos.

Voces

Todo da igual y nada realmente importa,

dice la muerte.

Y en la vida humana, parece que todo vale.

Aún así, ningún gesto es indiferente;

todo habla, aunque no haya nada entre líneas.

Uno

Somos más de lo que nos han dicho,

y nos dijeron muchas cosas;

de cada uno aparece un entusiasmo,

una constante que despierta el corazón

y es capaz de reinventarnos;

una luz blanca que graba sentidos

y nos da un color único desde la infancia.

Infantiles

He descubierto la madrugada,

los sueños se despiertan ahí

y se escucha...

"los pajaritos cantan, las nubes se levantan.

¡Que sí! ¡Que no! ¡Que caiga un chaparrón!

¡Que rompa los cristales de la estación!"

Viajes

Hay pueblos de tierra,

de caminos de luz

y señalados por cruces y altares;

y los hay blancos y azules,

de arrecifes empedrados a flor de agua;

también hay casitas de montaña y cuevas;

hay todo un mundo ahí fuera,

pero solo en uno estás tú para llegar a todos.

Sí

Y sí me acuerdo,

y sí lo guardo todo,

y sí está el cielo abierto,

y sí he crecido.

Sí, te quiero.

Miedos

La mente a veces desaparece

y todas sus imágenes con ella,

todo un mundo de historias

que cada día se imprimen en la memoria;

y la amenaza de otra vida, de lo posible,

de lo que no está escrito,

nos duele;

la libertad está ahí, y nos aterra.

Manuscritos

Una promesa en el exilio de casa,

una máquina que sigue en el encierro

y lo alerta todo;

y hay lugares que exploran en nosotros;

hay una línea imaginaria

de una crueldad fingida que nos separa

y dilata el tiempo cuando existe;

pero hay un punto, y está aparte,

al final del cuento, que nos cuida;

y volveremos a vernos, así lo escribimos.

Espejos II

Vino a quedarse;

y como la niña aquella,

esperó en la noche

donde duermen las sombras;

y se escuchaba susurrar a las hojas,

y el aire ya dormía;

y allí estaba,

también en la caverna; al otro lado.

Amigos

Y quedó un número esperando;

y las horas de años se recogieron en chocolate;

y no había nada que temer,

volveríais a quedaros un rato largo.

No hay momento en que no hayáis estado.

Sorpresas

Y si me quedo aquí,

parece que nada se mueve:

pero igual amanece nublado

y luego sale el sol;

quizá el camino no es tan largo

y el motor al fin funciona;

puede ser también

que ladre un perro y seas tú.

Mi alma gemela

En todas las personas que quiero;

en cada una de ellas, en todas a la vez.

Y ahí estoy yo;

y en esa mitad, estás tú.

Lazos

Cuando el final se decide,

la imaginación no se desborda

en tejidos al delirio;

y nos separa del propósito origen,

del parto que nos pierde en la vida.

Luz

Y algún día, entre dos flores,

el tallo se dará la vuelta y nos alcanzará;

somos el contraste que vive a la sombra,

y siempre es verde.

No tardes.

Beautiful

Una justa me tiró al suelo

y rompió una lanza;

llevaba tu nombre a fuego,

grabado en lágrimas de risa, de juegos.

Y cuando miré al cielo,

una nube te dibujó de nuevo;

y eras azul.

Endoll

Basta una imagen,

un árbol del alba despierto en rama;

allí donde tiemblan piernas

y saltan besos de mariposas rebeldes.

Hoy es amarilla, y nos encuentra.

Lugares

Veo a todas las personas que he conocido;

y en cada gesto hay un lugar

y en cada sonrisa un rostro;

hay todo un paraíso de imágenes,

de risas, de abrazos y voluntades;

y nunca me fui del todo,

y a veces vuelvo recordando

y nos veo a todos y a cada uno siendo.

No fue un sueño

Y anduvieron encontrándose en el bosque;

y tropezaron con las miguitas de pan de los cuentos,

y eran de chocolate y redondas;

y se abrió entonces un claro en el cielo,

las órbitas disparaban besos,

las rodillas eran un lazo mágico

y la noche detuvo su estrella;

esa estrella es la que ahora se ve

desde tu casa, y desde la mía.

Caídas

Yo no estaba muy delgada, me estaba muriendo.

Yo estaba detrás del peso;

y mis quilos hablaban

cuando el cuerpo no se sostenía;

recuerdo arrastrarme por el suelo

para llegar a la nevera;

recuerdo a Naia levantándome con el hocico

y recuerdo que las piernas no me sujetaban;

pero también recuerdo a mi hermana,

a mis hermanos, a mi tía, a mi prima,

recuerdo a mis amigos y compañeros,

a sus hijos;

recuerdo a todos los que me devolvieron la vida.

Cositas

Cada objeto cuenta una historia;

algunos contienen recuerdos,

los hay con rostro y los hay que aún huelen;

todos pertenecen a alguien

y los más preciados son de todos;

ninguno fue inventado,

se forjaron desde la memoria;

y cada uno habla de un momento,

de un lugar que habita en cada cuerpo.

Aullidos

Pequeñas cosas que dejaron de brillar,

batallas de ayer que arrebatan amor;

secretos que todavía siguen y aterran.

Y nada va a irse sin gritar por qué.

Yo

Un último año sin apenas lágrimas,

con pequeñas alegrías cercanas,

recuperando el cuerpo,

dibujando de nuevo hoyuelos

que ya eran solo rayas,

sorprendida en las pausas,

en el silencio;

al fin comprendiendo

qué era eso de ser una con el resto.

Madrugada

Y despertó un pájaro

cuando el sol no había salido;

y se perdió en un vuelo

que lo trajo hasta aquí;

traía un mensaje:

"Hoy los cuervos no estarán solos".

Certezas

No encontrar construye silencios

que hablan de ti,

que no idealizan, ni mienten;

hay una realidad en cada uno

que es única y no entiende de prisas,

que viene de lejos,

que pasa por nosotros y continúa,

y todo está contenido ahí.

A cada paso

En el amor,

cada mariposa es algo que desconoces

y cada amapola un pasito, una decisión;

y no hay motivos, ni excusas;

en el amor, cada uno puede ser

y está a la vuelta de tu esquina.

ilustración: Eva