Hay una cinta azul que brilla;
y puedo tocarla, y lo hago.
Y es preciosa, y es suave.
Y la acaricio.
Y me da tranquilidad hacerlo.
Y veo a mi bisabuela con su rosario;
hay una mecedora, y sonríe.
Y no recuerdo nada de ella,
solo sé que ella es mi primer recuerdo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario