miércoles, 28 de agosto de 2024

No son errores

Veo una imagen
en el suelo
con los brazos atados
hacia arriba,
los pies torcidos;

y se repite
por todos lados desde abajo,
fija y herida
con la cabeza caída y sola
por el pavimento;

no hubo intención, dicen,
sólo un corte
que quedó quieto
y sin tiempo para acabar
de dibujarse con los años;

y así construyen lo inevitable
que jamás sucedió.

domingo, 25 de agosto de 2024

sábado, 24 de agosto de 2024

Mandatos

Tengo una memoria frágil
y en ocasiones dibuja retratos
sin sentido ni parte propia
al otro lado del espejo,
aislados, idénticos,
en funciones y señales
que desconozco
y hago mías, quizá impuestas;

y sucede perdida en multitudes
de datos,
inútiles para el ánimo
y sin apenas cuestionar
la necesidad de ser sólo eso
y poco más;

temo a la (in)formación y al silencio,
a la ignorancia de mí misma
que sucede,
a no siempre saber qué es lo que hago
ni por qué;

y el consuelo duele en el cuerpo.

viernes, 23 de agosto de 2024

Deseo

Deambula en su alegría
y dificultades
sin esperar un momento pautado
para ser a su antojo,
detiene el tiempo
y se resuelve sin horarios
en un lugar que no empieza
ni acaba,
simplemente es;

y yo anhelo ni que sea un momento
a su lado.

jueves, 22 de agosto de 2024

Vida

La utopía crece cada día,
su contrario sucede inevitable
al dejarla de lado.

I could cry

Un olor muy concreto
me desgarra,
ese que respira fiesta
y devuelve muerte;

me he desplomado rota
con el gesto cambiado y cara abajo,
me he visto arrastrada
y llorado por dentro en los rincones
de una multitud cómplice,
entre alientos que se acercan rápido
al lugar donde estás,
allí,
callada en aquella lágrima seca
que revienta las mías
en cascada y sin consuelo.

Y aún huele.

miércoles, 21 de agosto de 2024

Trampa

Ahora miro su rostro y duele
en el mío,
la siento a corazón cerrado
en el cuerpo
sin poder detener su golpe;

una imagen en conflicto
se detiene
detrás de mis ojos
y no encuentro palabra
en ella;

se mueve entre pasillos
y murmura
intenciones retorcidas
sin mancharse,
siempre absuelta;

y yo he caído ya dos veces
en su artificio,
leal a nuestro pacto
que nació roto sin darme cuenta
como tantos otros.

Y no está bien.

martes, 20 de agosto de 2024

No todo acaba

Camino entre lo real
y lo que no se sostiene
con frecuencia aislada
en lo que ocurre;

nublo sucesos,
a veces sin atender
lo que se mueve en mí
y aparece sin avisar;

nada sabe a cierto
hasta resolverse conmigo
y junto;
 
la felicidad se siente
como un sueño
hasta que impacta en otro
y vuelve a mí
en un lugar que puedo tocar
y perdura;

un abrazo sin juicio ni sentencia.

lunes, 12 de agosto de 2024

Despierta

Puedo andar
por caminos de piedra
o hundir mis pies
en la arena
y entrar al mar;

puedo caer al suelo
y romperme,
quedar atrapada
o no volver a tierra
sola;

puedo habitar lo inevitable
y soñar lo imposible,
reír por eso
o llorar la pérdida
que ocurre;

y a la vez, estás tú y estoy yo.

viernes, 9 de agosto de 2024

Dualidad

No hay amor en la culpa,
sólo palabras que duelen,
y mucho;

lo imposible no es una excusa,
no todo puede
ni se repite idéntico
en cada cuerpo;

no es inmutable la voluntad
ni ajena a lo que sucede,
no existe sin más ni es libre;

nadie nace sin condiciones
ni igual,
encajar no es fácil
y menos en el hábito
de lo social,
en lo que se supone verdad;

hay sentencias que desgarran el ánimo,
y una sólo es lo que puede ser.

Mírame.

miércoles, 7 de agosto de 2024

Mi rapsoda

Hoy me pareció ver a mi padre,
no era él;

no pude alargar el instante
ni evitar el vacío
que siguió a su latido y lloré;

ahora no puedo moverme,
como si este lugar
lo hubiese escogido conmigo
en el momento oportuno
y el silencio adecuado
para abrazarme otra vez,
o así mirar de reojo con su sonrisa
calmando mi ánimo hoy;

y aún me hace falta, mucha falta;
él ya no lo sabe y Dios no existe.

martes, 6 de agosto de 2024

Aún siento

Ya no contemplo el camino,
no alcanzo;

el bache existe
en multitud de agujeros
inevitable,
atrapa el pie y lo detiene,
no hay relojes;

y a cada paso
le sigue un pensamiento
tras otro,
se repiten juntos
sin pausa y a la vez;

si yo en medio y nadie al lado,
continúo con anteojeras
y galopo sin rumbo,
desconocida
en lo que parece un sueño;

y jamás despierto, no del todo.

lunes, 5 de agosto de 2024

Continuo

Lo pasado se asienta
en el cuerpo,
crece con los años
y se reinventa en solitario,
no cierra los ojos;

y aquí permanece
casi ileso,
a veces revuelve el estómago
y desordena los días
a su antojo,
otras los resuelve y ríe,
interviene en lo que ocurre;

así el presente es un delirio,
una pelea sin bandera
repleta de mitos y sueños,
algunos rotos,
que simulan la derrota
una y otra vez,
y otra más;

el futuro ni se plantea.

domingo, 4 de agosto de 2024

Imprevisto

Una caída y un beso,
sueño en la mirada ausente,
una nota en cada pestaña
y toda la melodía en el rostro;

agotada y libre
en cada nuevo sentir,
una sonrisa aparece
sin forzar nada
y permanece sin más;

los días se alargan,
el corazón se detiene
un segundo
para oler ese lugar precioso
y ya familiar.

No me sueltes del brazo.

sábado, 3 de agosto de 2024

Alegría

Ayer me dejé caer
en la lluvia,
en cada burbuja de oxígeno
y la claridad de su tormenta negra;

la palabra se inventó de nuevo,
todas juntas salieron en cascada,
libres y lúcidas
ajenas al tiempo esclavo.

¡Las creí muertas y han vuelto!,
desordenadas en su caos
con todo a la vez
entre truenos y rayos suspiro.

Hoy me sonríen hasta las pestañas.
Y no fue un sueño.

viernes, 2 de agosto de 2024

Límite

Los días no siempre suceden
al mismo ritmo;

hoy su pausa y la mía
no coinciden,
demasiadas letras
se oponen;

un hilo me atraviesa por dentro,
acelera latidos
y debilita al pasar
toda explosión hacia fuera;

siento un cansancio
que recuerdo
y busco refugio donde respirar,
poco más.

Hoy siento que no llego,
no conmigo y así.

Tengo sueño, mucho sueño.

jueves, 1 de agosto de 2024

Parpadeos

La palabra despierta
muy pronto y cansada,
la emoción suda el cuerpo
y deja señales
por todos lados sin resolverse;

elevo el cuerpo a cierta distancia
del suelo,
me recojo arriba en las piedras
y al cobijo de un árbol,
falta aire fresco y arden los ojos,
no acierto ya;

y esa impotencia
alarga los días en desmayo,
oculta cuadernos
y los suelta cuando duerme;

el rostro conoce
lo que se guarda dentro,
y sonríe.

Nada detiene el pensamiento.